El cantante italiano Salvatore Adamo puso romanticismo al Festival Internacional de música de Viña del Mar en Chile, con una amplia muestra de sus más de 50 años de carrera que el público celebró y coreó.A pesar de que el inicio del recital fue frustrado debido a que el micrófono estaba apagado, Adamo recuperó rápidamente la atención de los 15.000 espectadores de la Quinta Vergara, con una de sus más conocidas canciones: "Es mi vida".
El cantante, que lució un traje oscuro, con camisa blanca y corbata gris, estuvo acompañado por una nutrida banda que incluía vientos y cuerdas, y que lo acompañó en otros clásicos como "Un mechón de tu cabello" o "Le neon".
"Estoy emocionado de volver. Sé que ustedes han vivido cosas terribles. Estoy emocionado de ver que se volvieron a levantar", afirmó el cantante, que ha vendido más de 100 millones de copias de sus álbumes en el mundo, en idiomas como el español, italiano, alemán, francés, coreano, o turco.
Adamo finalizó su recital con canciones como "Mis manos en tu cintura" e "Inch Allah", coreada por los miles de espectadores, entre los que se podían leer carteles como "Adamo eres parte de nuestras vidas".
Por su larga trayectoria, Adamo recibió de parte del "monstruo" todos los premios posibles: la antorcha de oro, la antorcha de plata y la gaviota de plata. "Creo que puedo decir sin ser presuntuoso que ha sido una gran noche para mi", agradeció.
El público que asiste al festival de Viña del Mar, conocido como 'el monstruo' por sus sonoros abucheos, premia con 'Antorchas' y 'Gaviotas' a sus artistas favoritos, aunque también baja del escenario a quienes no le gusta.
Las próximas jornadas estarán protagonizadas por el dominicano Juan Luis Guerra, los españoles José Luis Perales y Rosana, el puertorriqueño Luis Fonsi y el intérprete de bachata estadounidense Prince Roy, junto a los cumbieros argentinos Ráfaga y Garras de Amor.
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