Andrea Dellacasa, la actual soberana del Festival del Viña del Mar, sorprendió a todos pasado el mediodía de este viernes con uno de los piscinazos más atrevidos que ha tenido el certamen en su historia.La soberana ingresó al sector de la piscina del Hoetl O’Higgins, donde estaba toda la prensa reunida, al ritmo de una sensual canción de Amy Winhouse. Venía vestida con una bata roja, la banda y la corona. Al llegar al sector se despojó de la banda, la bata y la corona, para quedar vestida con un bikini verde.
En ese momento Francisco Saavedra, el periodista de Canal 13 que fue generalísimo de su campaña, la interrogó: “Pero Andrea, prometiste algo sorprendente y un bikini es lo que hemos visto en todas las reinas”. Dellacasa entonces preguntó a los periodistas si querían más y ante la obvia respuesta positiva, comenzó su performance.
La modelo dio la espalda a la prensa y primero se quitó la parte de arriba del diminuto atuendo de dos piezas. Sin darse vuelta, hizo lo mismo con la parte de abajo y sólo entonces se tiró, tapada sólo con tres pequeños stickers plateados, a la usanza de los espectáculos de revista.
Entonces, se acercó a la piscina y se lanzó al agua, donde permaneció bastante rato conversando con la prensa. Luego salió, y sin volver a taparse se paseó ante los periodistas y gráficos.
“Espero que estén felices. Traté de ser consecuente con lo que prometí. Tenía unos nervios bárbaros porque pensé que se podían despegar (los stickers). Gracias por elegirme y que siga este festival”, fueron las palabras de la reina antes de retirarse, siempre acompañada de su hermano Diego.
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